Unas 40 personas disfrutaron el pasado sábado de la exposición ‘Las Edades del Hombre’ en la Catedral de Plasencia, en un viaje cultural organizado por el Ayuntamiento y la Universidad Popular. Una muestra de valor extraordinario que ha salido por primera vez de Castilla y León a otra ciudad española. 

Un viaje cultural que ha contado con la presencia del Concejal de Cultura, Raúl Ayuso, quién ha querido resaltar «la calidad de la exposición y la experiencia única de poder conocer y ver en primera persona obras de gran valor en el marco incomparable de la Catedral de Plasencia, así como poder pasear por una ciudad monumental con tanto calado en nuestra historia». Un viaje pensado para disfrutar y conocer más sobre nuestro pasado ha recalcado Ayuso «y que ha supuesto una jornada de convivencia entre nuestros vecinos y vecinas».

Durante la jornada del sábado, además de la citada muestra, los excursionistas aprovecharon el día libre para poder disfrutar de los encantos de la ciudad placentina, visitando además la Plaza Mayor, el Museo Etnográfico de la ciudad,  la muralla y el Parador de Turismo entre otros. Sin duda un viaje muy completo que dejó gran sabor de boca. Ya por la tarde y en varios grupos visitaron la exposición de forma guiada:

‘Las Edades del Hombre’

Una exposición que nos permite conocer una muestra inédita de un total de 180 obras de arte sacro procedentes, en su mayoría, de toda Extremadura. Algunas de pequeñas ermitas e iglesias de pueblo, sacristías o conventos de clausura. Hay piezas emblemáticas del patrimonio y la historia que vienen de otras catedrales, monasterios, museos y particulares, así como, de otros rincones de España y del otro lado del Atlántico.

Y es que el visitante puede contemplar obras de artistas de la talla de Zurbarán, El Greco, El Divino Morales, Gregorio Fernández y Luis Salvador Carmona, lo que la convierte en una muestra única con una calidad suprema y espectacular.

‘Transitus’ es el lema de Las Edades del Hombre en Plasencia y las obras transitan por todos los estilos y épocas. El montaje, adaptado a los tiempos, tiene mucho de audiovisual y de la exposición se puede disfrutar con todos los sentidos. No solo la vista. Se puede oler, se puede escuchar porque tiene banda sonora propia y se puede tocar porque es una muestra inclusiva.