El Ayuntamiento nombró el pasado viernes, día 21, a Doña Valentina Rubio Diez, conocida como Sor Victoria, Hija Adoptiva de Campanario, en un acto que se celebró en un abarrotado y emocionado Salón de Plenos del Consistorio.

Con esta distinción, el Ayuntamiento reconoce la especial vinculación que une a Sor Victoria con la localidad y sus vecinos/as, así como pone en valor su labor social, cultural y humana.

Entre sus labores, destaca su promoción cultural de colectivos, especialmente con las mujeres, la creación y difusión de salud preventiva, su implicación en la educación y promoción cultural de muchas generaciones de niños y niñas y, en especial, su labor con los enfermos, personas mayores o gente desfavorecida, entre otros.

Pleno extraordinario

El nombramiento tuvo lugar en un abarrotado y emocionado Salón de Plenos del consistorio, que contó con la presencia de todos los miembros de la nueva Corporación Municipal de Campanario y de muchos vecinos y vecinas.

Tras las intervenciones de los dos grupos municipales, el alcalde le hizo entrega de una placa conmemorativa de su nombramiento como Hija Adoptiva de Campanario y un ramo de flores y la insignia municipal.

“Nunca pensé que merecía tanto amor y cariño por parte de todos los vecinos y vecinas de Campanario, el nombramiento ha sido una gran sorpresa que creo que no merezco y que creía que era para personas interesantes”, dijo humildemente Sor Victoria ante los presentes.

“Me llevaré un gran recuerdo”

En esta línea, recordó que lleva 50 años en Campanario y aseguró que se llevará “mucho” de Campanario y a todos en su corazón. “Creo que he entrado en todas las casas del pueblo y en todas me han abierto sus puertas y corazón, de todas me llevaré un gran recuerdo”, añadió la ya Hija Adoptiva.

Finalmente, tras agradecer el nombramiento al alcalde y corporación, así como a todos y todas los que hicieron posible el acto, se despidió diciendo: “Os quiero mucho y seguiré rezando por vosotros”.

Sor Victoria, por su parte, marchará el próximo 28 de junio al Hogar que las Hermanas de la Providencia tienen en Idiazabal (Guipúzcoa), donde las hermanas mayores reciben los cuidados de la comunidad.